Este fin de semana se vivió en el circuito de Spa de Bélgica una nueva carrera de fórmula 1 en la que destacó las últimas 10 vueltas en las que hubo de todo, justo lo que no hubo en las 34 restantes. La salida estuvo marcada por la incertidumbre de ver si habría algún accidente, pero no fue así, algún toque que otro, pero ninguno de importancia. Hamilton salió primero seguido de Kimi Raikkonen y Alonso conseguía meterse cuarto. En el paso de la primera vuelta, Hamilton hizo un trompo que facilitó que Kimi se pusiera primero, manteniendo Hamilton el segundo puesto con Massa detrás. Toda la carrera permaneció así hasta que faltando 4 vueltas empezaron a caer gotas de lluvia, que dos vueltas después ya era una lluvia en toda regla. El mas listo fue Heinfield, que entró faltando 3 vueltas y acabó tercero en pista. Si hubiera habido una vuelta mas hubiera ganado, ya que cambio los neumaticos por unos intermedios. También lo hizo Alonso, pero una vuelta mas tarde, lo que le hizo caer al octavo puesto y acabar cuarto en la carrera justo en la linea de meta, en la que adelanto a dos monoplazas. Pero la lucha estaba por delante, Hamilton empezó a presionar a Kimi y en su intento tuvo que saltarse una chicane, por lo que dejó pasar otra vez a Kimi que había perdido la posición e inmediatamente cogió su rebufo y le paso en la siguiente curva. Despúes, con la lluvia y un doblado, Hamilton tuvo que salirse de la pista, hecho que aprovecho Kimi para recuperar el liderato otra vez, pero en la siguiente recta se fue contra el muro debido a la lluvia. De aquí al final, un paseo con precaución por la lluvia hasta la meta, con Massa segundo. La noticia vendría después de la carrera, cuando la FIA sancionó al inglés con 25 segundos por acortar por la chicane y no dejar el paso a Raikkonen, que aunque si cogió la primera posición en ese momento, se pegó a él para aprovechar su rebufo. Al final ganador Massa, seguido de Heinfield y Hamilton tercero.
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